Artículo: 13
Por: María Santillán Salazar
El
envejecimiento es un proceso continuo, a lo largo de la vida desde que nacemos
vamos envejeciendo, atravesando por diversos cambios, característicos de cada
etapa de la vida que debemos aceptar y aprender a vivir con ellos. En esta
etapa ocurren cambios biopsicosociales resultantes de la interacción de
factores genéticos, sociales, culturales, del estilo de vida y la presencia de
enfermedades. Es decir con el paso de los años se va produciendo un deterioro
de la capacidad del organismo para la regeneración de las células.
El sistema gastrointestinal no es la
excepción, por lo que a nivel de la boca lugar donde se inicia la digestión con
la masticación de los alimentos y donde participan los labios, dientes, lengua
y paladar entre otros, tenemos que con la
edad se presentan una serie de cambios
como; el esmalte de los dientes se desgasta, las encías que dan soporte al
diente se deterioran exponiéndose las raíces dentales y en ocasiones hay
pérdida de la propia dentadura, se presenta disminución de la saliva, esto
demora el acto de comer ya que hace que el adulto mayor requiera de más tiempo
para preparar el bolo alimenticio y ser tragado , las personas mayores
suelen producir menos saliva, lo que causa sensación de boca seca,
interfiriendo en la percepción del gusto, además de dificultar ligeramente la
digestión y potenciar algunos problemas dentales. Junto a ello, los problemas
de masticación derivados de la pérdida de piezas dentales o del uso de
dentaduras postizas también pueden interferir en el disfrute de la sensación
del gusto.
La
salud oral del adulto mayor es un indicador de su cuidado odontológico recibido
durante toda su vida. Las consecuencias de los problemas orales son graves,
pues limita la gama de alimentos a ser consumidos, especialmente los que son
ricos en proteínas y fibras, repercutiendo negativamente en el estado
nutricional y funcional. También disminuye la autoestima
por los cambios en la apariencia personal y alteraciones en la comunicación
repercutiendo al final en su calidad de vida.
MEDIDAS DE
AUTOCUIDADO DE LA BOCA
• Realizar la higiene oral con un cepillo suave para evitar lastimarse las encías.
• Lavar dientes y lengua para quitar restos de alimentos.
• Usar hilo dental en vez de palillos.
• Consultar al dentista por lo menos 1 vez al año para revisión
y ajustar la prótesis en caso de molestias.
• Utilizar enjuagues bucales tres veces al día
• Mantener limpia la prótesis (si la tiene), Retirarse la
prótesis diariamente de 15 a 30 minutos, dormir con ella si está bien ajustada,
de lo contrario debe ser retirada por las noches y dejadas en agua.
· Evite
consumir en exceso dulces y harinas.
“Las
consecuencias de los problemas orales son graves, pues limita la gama de
alimentos a ser consumidos, especialmente los que son ricos en proteínas y
fibras”.
Artículo publicado en el Vespertino
“Satélite” el día 26 de Junio del 2013.
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