Por:
María D. Santillán Salazar
Se calcula que un 18.5%
de la población anciana tiene diabetes, o prácticamente una de cada cinco
personas con edades comprendidas entre los 65 y los 74 años.
La diabetes mellitus es
un trastorno metabólico que se caracteriza por los altos niveles de glucosa en
sangre como consecuencia de un déficit en la secreción de insulina o por la
utilización ineficaz de la misma. Se considera como niveles normales de glucosa
en sangre: cifras menores o igual a 100mg/dl.
Los factores que
condicionan a la presencia de esta enfermedad tenemos; antecedentes familiares
o predisposición genética, obesidad, vida sedentaria o disminución de la
actividad física, polifarmacia o ingesta de numerosos fármacos, enfermedades,
hipertensión arterial.
Algunas
personas con diabetes no saben que
padecen la enfermedad, porque en su inicio no suele presentar síntomas. Si la
persona no recibe un tratamiento para la
diabetes se siente cansada, con hambre frecuentemente o sed constante, puede
que pierda peso, necesidad de orinar con frecuencia o tenga problemas con la
vista, como visión borrosa. También puede contraer infecciones de la piel o
tener cicatrizaciones lentas cuando se ha cortado o lastimado.
El diabético
a causa de esta enfermedad suele tener una serie de complicaciones:
·
A nivel ocular; como cataratas,
hemorragias oculares, desprendimiento de retina y retinopatía diabética.
· Complicaciones renales como; alteraciones en
el funcionamiento de los riñones, hasta la uremia o aumento del ácido úrico.
· Neuropatía periférica, se caracteriza por la afectación
en distintos grados del sistema nervioso periférico, daño en los nervios de las
extremidades.
· Una complicación especial
e importante en el paciente diabético es el síndrome del Pie diabético, que se
caracteriza por disminución en la sensibilidad y circulación sanguínea en los
miembros inferiores predisponiendo al paciente a padecer de heridas y erosiones difíciles de
cicatrizar con riesgo a infecciones y al final a una mayor proporción de
amputaciones.
MEDIDAS DE AUTOCUIDADO PARA EL PACIENTE DIABETICO
Ø Consumir una dieta bajo en azúcar y carbohidratos o harinas,
disminuyendo el pan, postres, frutas como la papaya, mango, plátano.
Ø Aumentar el consumo de alimentos ricos en fibra como; pan
integral, avena, verduras frescas, frutas como la manzana, cítricos.
Ø Realizar ejercicio diario
de acuerdo con sus capacidades, como; caminar, gimnasia, natación de
preferencia con vigilancia médica.
Ø Mantenga una buena higiene corporal diaria, revise diariamente
sus pies, utilice zapatos cómodos.
Ø Busque información respecto a la enfermedad para autocuidarse.
Ø Mantenga su peso adecuado, al disminuirlo también disminuirá los
niveles de glucosa.
Ø Cumpla con las indicaciones médicas, respecto al tratamiento
farmacológico. Evite automedicarse.
Ø Ante cualquier lesión en sus pies acuda al médico.
Artículo publicado el 30/oct/2013 en el Vespertino “Satélite”
(Trujillo-Peru)